En esta ocasión dedicaré un reconocimiento a Herlinda Morales, una mujer ama de casa, artesana y representante de las mujeres indígenas.
Herlinda vive en la comunidad de Santa Fe de la Laguna en la rivera del lago de Pátzcuaro. Desde chica como es tradición empezó a trabajar la alfarería vidriada ayudándole a su mamá. Debido a las limitaciones económicas de su familia no pudo tener más estudios que la educación básica, sin embargo esto no significó un obstáculo para que ella tuviera aspiraciones.
Su primera inquietud fue asistir a un grupo de mujeres que se reunían en el pueblo, este grupo estaba a cargo de Guadalupe Hernández Dimas y consistía en crear una unidad entre las mujeres indígenas para conocer sus derechos, aprender y sentirse escuchadas. En un principio no tuvo el apoyo de su papá dado que entre las costumbres del pueblo es preferible que la mujer se quede en casa pero Herlinda, decidió enfrentar a su familia y hacer que su papá le diera permiso para formar parte del grupo.
Uarhi fue entonces la organización en la que Herlinda por primera vez, se siento escuchada y tomada en cuenta, podía compartir con otras mujeres sus inquietudes y aprender cosas nuevas.
En uno de los talleres de alfarería vidriada que se impartieron en Uarhi, Herlinda se dio cuenta que el esmalte que utilizaban para sus piezas tenía alto contenido en plomo y que era un elemento tóxico para su salud. Por tradición, quienes trabajan la alfarería utilizan este esmalte que se conoce como greta.
Cuando Herlinda regreso a su casa, le dijo a su familia que deberían dejar de utilizar la greta porque era un riesgo para la salud. Como era de esperarse su mamá le dijo que no tenía porque cambiar, si ella toda la vida había trabajado con ese esmalte y nunca le había pasado nada. La última palabra en ese entonces la tenía su papá por lo que para Herlinda supuso un reto lograr que su familia entendiera las razones para no usar la greta.
El plomo es un elemento tóxico soluble al contacto con ácidos como el jugo de limón o naranja, vinagre y chile que se utilizan comúnmente en los alimentos y al estar trabajando lo inhalan creando un ambiente de trabajo contaminado, en los niños, el plomo puede provocar un daño en el sistema nervioso y en el cerebro, dolores de cabeza, anemia, convulsiones, y lento crecimiento. En las personas adultas la intoxicación puede provocar problemas durante el embarazo, presión de la sangre alta, dolor muscular, falta de concentración y otros malestares. Aunado a esto Herlinda nos cuenta que antes no se cuidaba separar el trabajo del taller con el quehacer de la casa es decir que el delantal que usaban para trabajar la alfarería también lo usaban para cocinar, lo mismo con las cubetas y algunas otras herramientas.
Con el paso del tiempo su familia aceptó la ayuda de Barro Sin Plomo una ONG dedicada a ayudar a los artesanos y artesanas para una producción de alfarería libre de plomo.
La apertura y disposición de Herlinda fueron un ejemplo para que el director de Barro Sin Plomo vinculara a Herlinda con la productora Galatea audiovisual bulbo para realizar un largometraje documental de su vida.
Herlinda el año pasado salió por primera vez de México a un evento de arte folclórico en Santa Fe Nuevo México en Estados Unidos. Nos contó que para ella fue parte de un sueño haber podido salir y conocer un nuevo país; muy contenta nos dijo que ahora sabe que sus piezas pueden ir más lejos, prueba de ello fue haber encontrado a una mujer estadounidense que tiempo atrás le había comprado unos candelabros en su tienda de Santa Fe de la Laguna, Herlinda visitó a la señora en su casa y se congratuló de ver su trabajo puesto en la decoración.
Otro de los momentos que emocionaron mucho a Herlinda fue cuando gracias a su participación como representante de las artesanas de México en Estados Unidos pudo ver a sus hermanos que hacía más de 15 años habían partido del pueblo en busca de nuevas oportunidades.
Todo esto ha significado para Herlinda el resultado de su esfuerzo y de la ayuda que ha recibido de muchas personas y asociaciones.
Herlinda salió nuevamente a Estados Unidos para presentar la primera parte del largometraje Tierra Brillante donde ella es la protagonista. Los Ángeles, California y Nueva York han sido nuevos mercados en los que ha ido comercializando sus artesanías. Desde el 2005 es una de las artesanas que trabaja sin plomo, tiene su propia tienda tienda-galería y exhibe sus piezas tanto para verse como para comprarse.
Como Herlinda ha habido muchas mujeres indígenas que poco a poco han ido quitando piedras en el camino. La búsqueda por tomar sus propias decisiones y sentirse tomada en cuenta han hecho que Herlinda sienta una equidad de género en la sociedad.
Su testimonio ha sido parte de las publicaciones de la asociación Uarhi en el libro de “Quitando piedras en el camino”
Herlinda agradece especialmente a Víctor Águila Sánchez director de la ONG Barro Sin Plomo y a Guadalupe Hernández Dimas conocida también como Nana Lu porque gracias a ella se han reunido muchos testimonios de mujeres indígenas que han ido logrando cambios para vivir mejor.
Nana Lu en el 2005 fue nominada para el premio nobel de la paz, ella es nacida también en Santa Fe de la Laguna y fue quién invitó a Herlinda a entrar a aquél primer grupo de mujeres en el que se despertó una visión diferente para Herlinda.
Ejemplos como ellas son un referente para darnos cuenta que es posible la superación dejando de lado las imágenes de dependencia y servidumbre en el que la mujer queda marginada.
Gisel Gómez Cendejas Fotografía Guillaume Cordier
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